El Blog de Javier Caraballo

Javier Caraballo es periodista de EL MUNDO. Es redactor Jefe de Andalucía y autor, de lunes a viernes, de una columna de opinión, el Matacán, sobre la actualidad política y social. También participa en las tertulias nacionales de Onda Cero, "Herrera en la Onda" y "La Brújula".

10 noviembre 2006

Minimizar


Cuando llegó la noticia al teletipo, bastaba con leer la primera frase: «El presidente andaluz, Manuel Chaves, minimizó hoy los datos de la pobreza severa en Andalucía, que situó en unas 29.000 familias». Así empezaba el texto de la agencia Efe sobre uno de los debates de ayer en el Parlamento andaluz. «Minimizó», dice.

No sé si le habrá ocurrido lo mismo, pero ésta es de esas noticias sobre las que no hace falta leer más. Veintinueve mil familias que, haciendo cálculos estrechos, sumarán alrededor de 130.000 estómagos en situación de pobreza severa. No llegan al 25 por ciento de la renta media disponible. Ni para comer. Pero Chaves «lo minimizó». Más adelante, el teletipo aclara la razón: Sólo se trata del uno por ciento de la población andaluza.

Pueden imaginar que si el presidente «minimiza» la pobreza extrema, a partir de ahí, a los que sólo son pobres de solemnidad, ni siquiera los considera como problema. Hace poco, fue el propio Instituto Nacional de Estadística quien nos alertó con un dato muy llamativo. En Andalucía, según la estadística oficial, existen dos millones y medio de pobres. Como la cifra es gorda y abulta una barbaridad, Chaves, en vez de minimizar, lo que hizo ayer fue ‘matizarla’. Que viene a ser lo mismo, pero más suave.

Según el presidente, la correcta interpretación de las cifras del INE es la siguiente: Esos dos millones y medio de andaluces están sólo «en el umbral de la pobreza». En el umbral, que tiene que ser como un limbo urbano, el hueco estrecho entre dos contenedores. La cuestión es que ahí, en el umbral, la pobreza no es tanta como uno se imagina, porque, según Chaves, «no significa exclusión ni que se carezca de recursos para las necesidades básicas». El umbral, el portal. Ni sí, ni no.

Sostiene Chaves, además, que no hay de qué preocuparse, porque la economía andaluza es tan potente que acabará incorporándolos a todos. A ellos, a los pobres del umbral, o a quienes hereden su miseria, porque lo que sí admite el presidente es que la confluencia de Andalucía con la renta española avanza, pero a ritmo lento. De hecho, la renta media de las familias andaluzas ronda los 18.300 euros al año, lo que nos sitúa bastante lejos de la media española. En esto, el presidente de la Junta tuvo ayer una frase antológica. «Sólo nos separan quince puntos de esa media», dijo Chaves. Reparen otra vez lo encantado que está Chaves consigo mismo. «Sólo quince puntos». Esto no lo dice ni Lopera, vamos.

Es probable, en fin, que no haya muchos plenos como el de ayer, tan representativos del abismo que separa el discurso oficial y la realidad andaluza. Chaves acabó su faena como siempre, ofreciendo pactos y convenios. El presidente siempre tiene a mano un pacto para cada problema y «tolerancia cero» para cada escándalo. Lo que no tiene para ninguna de las dos cosas es un proyecto, una idea, un compromiso. Ya le vale con minimizar.

8 Comments:

At 10 noviembre, 2006 14:58, Anonymous Anónimo said...

No sé a quien leí la frase, pero me pareció muy concluyente sobre el devenir de Andalucía: "Con el nuevo Estatuto los ricos cada vez más ricos, y los pobres cada vez más andaluces".

 
At 12 noviembre, 2006 16:27, Anonymous Anónimo said...

Javier, perdona el off-topic, pero es que estoy alucinada viendo lo que es el lobby del turismo en Sevilla. Y contemplando también cómo los políticos se prestan a bailar al son de los lobbies cuando llegan las elecciones.

Claro, porque a estos señores tan empingorotados del gremio del turismo (abajo el libre mercado, vivan los gremios) no les pasa lo que a mí, que o vuelo en bajo coste o no puedo volar. Ni les pasa tampoco lo que a los emprendedores, esos que han empezado con una manita delante y otra detrás, sin un puñetero MBA y que, pese a todo, pese a tener que apencar con el atraco a mano armada (estatal) de la Cámara de Comercio y tantos otros, ya están saliendo al mundo a traerles a domicilio los chips a las industrias andaluzas, para lo cual no tienen más remedio que darle al vueling y al bajo coste. Y a los kilómetros y kilómetros por las tercermundistas carreteras andaluzas. Y a las meninges. Y a la innovación. Y al trabajo a destajo, sin tiempo para ir a Pineda. Pero esos se ve que no tienen ningún lobby proteccionista que los defienda. Esos no se organizan para pedir al político que los proteja de la competencia y de sus pocas ganas de adaptarse.

Opino que a estos señores del turismo más les valdría empezar a organizarse para pagarse ellos solitos sus promos y sus Fibes. A buscar financiación privada para sus historias, porque la gente de a pie ya estamos hartos de pagárselas y de que nos tomen el pelo.

Y a los otros, a los del vetusto comercio sevillano, en vez de estar a la que salta con las subvenciones y en lugar de dedicarse a celebrar con alfombras rojas el que se coarte la libertad ambulatoria de su potencial cliente, tal vez les convendría empezar a preguntarse qué es lo que hacen el chinito y el morito de mi barrio, que tampoco tienen lobbies ni MBAs, y por eso han aprendido algo tan sencillo como que, si quieren que yo les compre, tienen que tener la tienda abierta a las horas a las que pueda hacerlo.

 
At 12 noviembre, 2006 19:30, Anonymous Anónimo said...

¿A que te refieres Monica con los off topic, creo que nos perdemos algo en tu comentario?

 
At 12 noviembre, 2006 22:14, Anonymous Anónimo said...

Uy, anónimo, pues es verdad. Hoy estoy un poco despistada. Es mi cumpleaños.

Pues, verás, me refiero a que, aunque el post de Javier no iba de eso, me estoy quedando a cuadros con el devenir del paisaje preelectoral en Sevilla. Quiero decir con noticias como que los hoteleros sevillanos digan saber de repente la vida y milagros de cada uno de los pasajeros que vienen y van por el aeropuerto, sus correrías etílicas y si duermen o no en casa de amigos. Y luego con declaraciones como ésta (página 5 de la sección de local de El Mundo): Zoido, candidato por el PP a la alcaldía de Sevilla: “las líneas de bajo coste ponen en peligro el turismo de la ciudad”. Entre unos y otros, quieren que desde el ayuntamiento se obligue manu militari a Iberia a mantener unos vuelos regulares que no son rentables.

Los políticos no deberían pintar nada en estas decisiones. Ni unos ni otros. ¿Por qué en vez de a esto no se dedican a bajar las tasas y a eliminar tanto burócrata inútil de los aeropuertos, de las consejerías y del ministerio? Si una se fija en el desglose de un billete de avión, ve que las tasas son mayores que el precio del vuelo. Una buena parte de nuestro dinero va a parar a ociosos organismos oficiales. A lo mejor si recortan en eso lo mismo se encontraban con que había algunas iberias que no tenían que salir corriendo de Sevilla.

Por ahí, por otros sitios, hay aeropuertos privados que funcionan estupendamente. Y los Fibes se construyen con cargo a quien va a utilizarlos o a quien cree que van a ser rentables como inversión, no a costa del sufrido contribuyente. Lo que pasa es que para eso hay que espabilar y no andar esperando siempre, como en Sevilla, a que un führer político que nos saque las castañas del fuego.

Y luego sale Beneroso y critica los planes y racataplanes de otros para acabar diciendo que lo que tienen de malo es que no son los suyos.

No, si se está poniendo la cosa para pensarse seriamente lo de emigrar.

 
At 13 noviembre, 2006 01:01, Anonymous Anónimo said...

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At 13 noviembre, 2006 01:01, Anonymous Anónimo said...

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At 13 noviembre, 2006 01:35, Anonymous Anónimo said...

Sí, sí, pero aparte de spam (falso) ¿algún argumento?

 

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