Avalanchas
Las avalanchas políticas tendrían que anunciarlas en los telediarios, justo después del hombre del tiempo. «Y para el próximo fin de semana, atención, porque se acerca una avalancha política que afectará a la mitad sur de España, principalmente a Andalucía. Si tienen pensado seguir la actualidad, adopten las precauciones necesarias para no resultar dañados ya que, según Meteosat, el origen parlamentario de esta avalancha la hace especialmente virulenta». En este plan, o sea. Como un servicio público más.
La medida sería especialmente recomendable para los próximos meses, porque se acercan las elecciones municipales y porque los estertores de la reforma del Estatuto pueden ser terribles. Los partidos, si se fijan, afrontan la indiferencia generalizada del personal con técnicas de propaganda por inundación. Un ejemplo. Después de haber debatido el Estatuto en el Parlamento durante dos años, y antes de que se inicie un nuevo debate en el Congreso, hace unos días, el PP anunció que presentará mociones en todos los ayuntamientos y diputaciones para que rechacen al texto aprobado. Un par de días después, el PSOE anunció, a su vez, que también presentará mociones en todos los municipios para que se pronuncien a favor del Estatuto. El PA, para no quedarse a la saga, también ha organizado su campaña estatutaria y es muy probable que en IU se esté debatiendo ya una huelga de hambre simbólica (una hora o así, entre el desayuno y el almuerzo) de todos sus concejales y cargos públicos. Esa es la avalancha.
De todas formas, ojo que la otra avalancha, la de las municipales, puede ser incluso peor. Por lo que llevamos visto, el PSOE está dispuesto a arrasar. Al punto que comienzan a asustar. Ese acto incalificable del otro día en El Coronil, con ‘alcalde jornalero’ del Sindicato de Obreros del Campo, donde el PSOE alineó a todos los delegados provinciales de la Junta. Todos, uno tras otro, con los coches oficiales aparcados a la entrada del mitin. El mensajes. subliminal de aquel despliegue estaba claro («Sólo con el PSOE llegarán las inversiones de la Junta») pero lo mejor era el lema oficial: «Apúntate al cambio». Que el PSOE, en Andalucía, utilice ese lema tiene su miga. O cara dura, según.
Y en Córdoba, ya ven, atosigan a la alcaldesa. Y en Huelva, ese docto orador que maneja el partido, Mario Jiménez, va y anuncia un plan del Gobierno de la nación contra la inseguridad de la capital. Y dice: «Mientras el alcalde está de copas, o de sarao en sarao, la seguridad ciudadana es un auténtico desastre en Huelva». Qué nivel, oiga. Como si, de repente, la competencia de la Policía y de la Guardia Civil recayera en los alcaldes. Y en Cádiz, el portavoz Rafael Román, comunica que el Gobierno de Zapatero le ha dado el visto bueno a su propuesta de «crear una nueva playa en el casco histórico». En fin, lo dicho. Política de inundación. Ojo, que se acercan avalanchas políticas.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home